91 541 62 97 

91 541 62 97 

Cuando una familia decide trasladar a un ser querido a una residencia de ancianos, es un momento donde surgen muchas emociones y preguntas. Es muy importante tener una relación positiva entre las familias y las residencias. Esto puede garantizar el bienestar del residente y anima a tener  un ambiente de confianza. En este artículo, vamos a destacar algunos puntos importantes para construir y mantener una conexión efectiva.

1. Tener una comunicación abierta y constante

La comunicación es la base de cualquier relación exitosa. Las residencias deben informar a las familias sobre el estado de salud, las actividades diarias y cualquier cambio relevante en la vida del residente. Por su parte, las familias deben compartir información valiosa sobre las preferencias, necesidades y hábitos del anciano para ayudar al personal a ofrecer una atención personalizada.

2. La familia participa activamente 

Mantener un vínculo cercano con el residente es la base. Visitar regularmente, llamar o incluso videollamadas son formas de demostrar apoyo y cariño. Además, muchas residencias organizan eventos donde las familias pueden participar, fortaleciendo la relación con el entorno del residente.

3. Mantener un respeto mutuo

Las familias deben confiar en el trabajo del personal de la residencia, quienes están capacitados para ofrecer cuidados especializados. A su vez, los cuidadores deben ser respetuosos con las decisiones y emociones de las familias, trabajando juntos para el bienestar del residente.

4. Resolver de forma anticipada los conflictos

Es natural que surjan inquietudes o discrepancias. La clave está en abordarlas de manera proactiva, buscando soluciones en equipo. Reuniones periódicas entre las familias y el personal pueden ser una excelente manera de tratar cualquier problema antes de que se convierta en un conflicto mayor.

5. Conocer los derechos y responsabilidades de cada uno

Tanto las familias como las residencias deben conocer los derechos del residente y sus responsabilidades respectivas. Esto ayuda a establecer expectativas claras y a garantizar un trato justo y digno en todo momento.

6. Confiar en el cuidado brindado a la persona

Las familias deben sentirse seguras de que su ser querido está en buenas manos. Por eso, es importante elegir una residencia con un enfoque humano, instalaciones adecuadas y personal profesional.

Una relación sólida entre las familias y las residencias de ancianos beneficiará al residente y puede reducir el estrés de ambas partes. Al trabajar juntos, es posible crear un entorno donde los ancianos se sientan valorados, respetados y cuidados, lo que es esencial para su calidad de vida.

PRECIOS EXENTOS DE IVA Descargue Folleto Solicite Información Sello de calidad